lunes, 19 de marzo de 2012

Crisis en la televisión

Aunque esté en otra trinchera yo siempre lucharé con los mismos. Me sigo sintiendo muy cerca de esos que madrugan para poner rumbo a Granada, desayunar en Estepa e ir comentando qué grabar. Sigo sintiendo como mías las charlas que quedan en ese coche donde se habla de totales, planos, compos y grafismo. Sigo mirando la televisión con ojos fiscalizadores.

Ya no tengo que minutar, ya no tengo que visionar, no tengo que marcar el TC de un bruto en mi libreta, no le doy vueltas al coco para buscar la frase perfecta que arranque un video. No locuto a la luz de una lámpara y frente a un micro con filtro redondo, no repito medianillas, no entrevisto buscando el total perfecto, no edito ningún tipo de video y quizás ya ni piense en imágenes.

Ahora busco otros objetivos, ahora me levanto pensando otras cosas y me acuesto con otros problemas, pero sigo siendo el mismo que ayer pensaba la estructura de un VTR y que mañana quizás lo volverá a hacer. Por eso, porque sigo siendo uno de ellos, me duele tanto las noticias tristes que recibo de cuando en cuando.

Tengo muchos amigos en el mundo televisivo, entre ellos cuento algunos genios de la comunicación, así, sin más, lo aseguro porque lo sé. Y sin embargo cada día las noticias son peores.

Sigo estando con ellos, siempre lo haré. Sigo viendo la tele con la fiebre de un periodista del medio y sigo cada día produciendo temas, aunque el destino sea otro. Soy tan de tele que aún sigo vistiendo camisas sin rayas para evitar el moaré y me sigo preguntando por qué diablos amo esta profesión.

Mucho ánimo amigos… sois grandes y seguro que todo mejorará.