jueves, 22 de abril de 2010

Asunción 70

Llegué, ví y vencí, solo así puedo resumir lo que ocurrió el pasado lunes de feria. Llegué a un lugar conocido, donde mi rutina guarda muy buenos recuerdos, ya no lo es, pero siempre sentiré que esa es mi casa. Ví a mucha gente, muchos amigos. Y vencí porque gané la batalla de la alegría noctámbula.

Más de 40 amigos nos reunimos el pasado lunes en un piso para beber y comer utilizando el pretexto de la Feria. Pescaíto, rebujitos, alguna que otra foto, bromas y cubatas fueron los ingredientes de una noche que por ser especial nunca es igual a la del año anterior y sin embargo nunca se pone en duda su éxito. Siempre es diferente pero nunca distinta.


Hubo tiempo para el recuerdo de etapas pasadas y charlas sobre el futuro. Nos pusimos al día del presente y coincidimos en que el mejor pasado fue en el que nos conocimos. Por un momento dejamos de ser realizadores, presentadores, redactores o cámaras, todos nos sabíamos partícipes de un mismo mundo y de un mismo modo de entender la vida. Una vida que nos ha juntado y que Dios sabrá qué nos tiene preparado.


Con la portada recién encendida bajamos al real, algunos ya se habían marchado pero los más seguimos el peregrinar que cada año nos conduce a ese lugar donde el albero se apodera de las suelas de nuestros zapatos y en el que como por arte de magia los problemas se ven de otra forma y las amistades se renuevan en el convencimiento de que nunca fuimos tan amigos como entonces.


La noche terminó cuando en el metro, sumido en el recuerdo de la propia noche repasaba los momentos más intensos que acababa de vivir. El pescaíto es historia y la Feria ha comenzado, aunque eso, y yo lo sé bien, es un simple pretexto para ver a mis amigos.


El año que viene esta cita será diferente, pero nunca distinta, y ojala que nunca cambie.

2 comentarios:

Angela dijo...

Y si no tenemos ese pretexto, nos inventaremos otro! eso seguro!

Paloma Jara dijo...

Basicamente, eres el mejor. Escribes con un nivel literario genial y eres buena persona. me pediste que te escribiera un comentario así y te lo he escrito.

La verdad es que eres realmente bueno y que te prohíbo terminantemente que cierres este peasso de blog. Hombre ya¡¡¡