viernes, 10 de diciembre de 2010

Ilusión

Era tarde, hacía frío y la estufa era la única acompañante agradable de la merienda. En la tele estaba un grupo de chicas intentando adivinar la respuesta de no se qué concurso, pero en lo que suena una llamada telefónica todo cambió. Al otro lado una voz cálida me comunicaba algo que por ser primario era sensacional. Mi piel fue la primera que reaccionó a la noticia tomando como suya la textura de un melocotón. Un aire de alegría me inundaba los pulmones y sin quererlo el agua que acumula mi lagrimal para los momentos especiales comenzó a emanar levemente, como no queriendo hacer ruido, como no queriendo deshacerme de la conciencia de felicidad que aquella noticia estaba desatando en mí de forma involuntaria.

Guardo un recuerdo inolvidable de la etapa en que ella era mi compañera. A menudo digo que aprendí mucho de ella, y que es la mejor compañera que he tenido, aunque he tenido y tengo la suerte de aprender de grandes compañeros.

Mi amiga tiene vida en su interior y yo estoy super ilusionado por ella, pero inexplicablemente también por mi.

Felicidades.

Pd. Tengo varias amigas embarazadas y les deseo lo mejor. Me encanta que me hagan tito.

1 comentario:

Paloma Jara dijo...

Ahora soy yo la que tiene la piel de melocotón y lágrimas en la cara. Para mí esto está siendo una experiencia maravillosa y sentir que con ella estoy haciendo feliz a mis amigos y a mi familia es una sensación todavía mejor.

A ver si todo sale bien y para Julio nos abrazamos los tres. Te quiero mucho, ya lo sabes.