Humo, luces cenitales, expectación, nudo en el estomago, compás, quejío, sones flamencos, otra dimensión, la de Miguel Poveda, la de un artista grande, la de una voz diferente.Las palmas miden los tangos, la voz dibuja el camino de Cádiz y sus alegrías, la copla renace con señorío, Miguel pregona a solas el Uvero, baila sentado por bulerías, canoniza con la soleá y pinta con sus manos los tarantos y las tonás más completas.
La Mistela encuentra su cénit. El Teatro Municipal de Los Palacios se queda con el eco de un grande, con el recuerdo de una noche mágica donde por primera vez el lamento cautiva y la risa se oculta en el llanto del compás de 12 tiempos y la melodía de los palos binarios.
Ayer renové mis votos flamencos. Y hoy os vuelvo a recomendar a este gran cantaor. Hace meses os hablé de él y os enlacé algunos vídeos. Os vuelvo a dar la oportunidad de verlo. Larga vida al flamenco.
http://laespiraldesilencio.blogspot.com/2007/12/flamenco-del-futuro.html
3 comentarios:
Pues sí. Larga vida al flamenco y al baile flamenco. No te pierdas, si alguna vez te tienes oportunidad de verla, a Rocío Molina. Una grande. El futuro es de ella. Y, por supuesto, a Manuela Carrasco. El pasado, el presente y el futuro también es de ella.
yo doy palmas a lo lejos!
un abrazo!
Una voz preciosa, un arte inigualable y una serenidad propia de los maestros... Simplemente magistral, como bien dices.
Besos paisano, hacía mucho que no te visitaba!!
Publicar un comentario